27/05/2007 Paramos a almorzar antes de bajar la pedrera. En ella, cuando nos lo permiten las piedras, bajamos pisando con los talones y dejando que éstas nos deslicen. Seguiría lloviendo hasta el coche.
 
Stop Slideshow
Start Slideshow
Refresh

Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias mediante el análisis de sus hábitos de navegación. POLITICA DE COOKIES